Vicente Fox, expresidente de México, ha vuelto al foco público a raíz del proceso interno del Partido Acción Nacional para designar a la persona abanderada del Frente Amplio por México. A pesar de que la alianza de la oposición está conformada por los partidos Revolucionario Institucional, de la Revolución Democrática y Acción Nacional es este el último quien determinará las candidaturas a la Presidencia de la República y a la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México.

El renacimiento del presidente que enarbolara el discurso de la transición democrática y terminara con la menor aprobación al respecto de las expectativas generadas ha venido acompañado de una cargada de dichos alrededor de los privilegios perdidos a raíz del triunfo de Andrés Manuel López Obrador como el retiro de la pensión vitalicia a expresidentes o el seguro de gastos médicos mayores con cargo al erario público.

En días recientes Vicente Fox aseguró en una entrevista que es necesario que se restablezca la pensión de expresidentes porque ‘ha batallado mucho económicamente’ a raíz de la cancelación de dicho privilegio constitucional. Puntualizó, además, que tiene que pagar cien mil pesos mensuales para tener seguro médico por cuestiones de edad y enfermedades.

 

La triste historia de las dificultades económicas de Vicente Fox se contrapone a lo que reflejan las cuentas de su negocio privado ‘Centro Fox’. El Centro Fox se constituyó jurídicamente como una Asociación Civil que permite recibir donativos deducibles de impuestos al 100 por ciento así como exentar el pago de impuestos por los recursos recibidos.

Estas Asociaciones Civiles con capacidades donatarias no son algo raro en el país aunque la cosa con el Centro Fox se complica cuando descubrimos que se fundó en el año 2006, apenas unos meses después de que el panista dejara la presidencia en medio de acusaciones por violación al proceso electoral para favorecer a Felipe Calderón.

Desde el año 2005 el secretario de Hacienda y Crédito Público de Vicente Fox, Francisco Gil Diaz, autorizó la constitución del Centro de Estudios, Biblioteca y Museo Vicente Fox Quesada, AC. Lo que constituye por sí mismo un conflicto de interés al encontrarse Vicente Fox en funciones como presidente.

A pesar de que la creación del Centro Fox debió ser cancelada por constituirse a través de un proceso viciado el sexenio de Felipe Calderón no solo fue omiso en sus compromisos constitucionales sino que se volvió participe de las ilegalidades cuando Ernesto Cordero, secretario de Hacienda y Crédito Público de Felipe Calderón otorgó el rubro de fideicomiso al Centro Fox.

La nueva designación como fideicomiso permite que el Centro Fox reciba donativos públicos, es decir, de funcionarios o gobiernos locales, municipales o federales sin tener que esclarecer el origen o el destino de dichos recursos. El Centro Fox puede deducir de impuestos a las empresas privadas o personas que ingresan dinero y al mismo tiempo tener en posesión dinero del presupuesto público sin tener que pagar impuestos al respecto ni transparentar sus gastos.

Estos sistemas de evasión y captación de recursos permitieron que el Centro Fox hoy tenga en su poder 86 millones 153 mil 425 pesos en las cuentas que se registran como de propiedad de la empresa del expresidente. A pesar de considerarse que dicho centro no tiene como propósito el lucro o la obtención de ganancias es claro que desde el 2006 a la fecha el Centro Fox ganó un total de 47 millones 776 mil 438 pesos en ganancias.

El Centro Fox ha entrado también en operaciones financieras por las que ha obtenido ganancias importantes. En el año 2020 la organización del expresidente destinó 14 millones 476 mil 16 pesos que le permitió a Centro Fox conseguir una ganancia anual de 613 mil 610 pesos por el concepto de instrumentos financieros en bolsa de valores.

El año 2021 el Centro Fox tuvo una importante ganancia sobre sus inversiones consiguiendo en conjunto ganancias por más de un millón de pesos, de acuerdo con lo reportado por el propio centro obtuvo ganancias por los conceptos de interés por 811 mil 118 pesos, rendimientos de acciones o títulos de créditos por 373 mil 977 pesos y por ganancia cambiaria 329 mil 902 después de invertir un monto de 4 millones 649 mil 490 pesos.

El Centro Fox identifica como servicio a la comunidad el programa ‘Presidente por un día’ que le permite a los alumnos de educación básica acceder a una réplica de la oficina desde la que despachó Vicente desde Los Pinos cuando fue presidente. Sin embargo no ofrece ningún servicio concreto ni ayuda a las comunidades en donde dice tener operaciones.

Vicente Fox pide que se le restablezca una pensión que ascendía a más de cien mil pesos mensuales además de los sueldos que se le brindaban por el concepto de ayudantía que le permitía contratar personas a su servicio y un seguro médico mensual, peticiones que resultan insultantes a la mayor parte de la población no solo por el privilegio que representan sino por provenir de un empresario que maneja, posiblemente de manera irregular, millones de pesos al año.