La Asamblea Estatal de Morena en la Ciudad de México, celebrada en la alcaldía Venustiano Carranza, fue abruptamente interrumpida por el diputado Julio César Moreno, conocido como “El Nenuco”, quien exigió un lugar en el presidium sin contar con derecho a ello.

Hasta ahora, las asambleas se habían caracterizado por el diálogo y la disciplina política, bajo el liderazgo del Comité Ejecutivo Estatal de la Ciudad de México, encabezado por Héctor Díaz-Polanco. Ningún otro legislador había desafiado el orden del día, el cual es aprobado por los integrantes y establece que solo la coordinadora del grupo parlamentario, Xóchitl Bravo, y la presidenta del Congreso de la CDMX, Martha Ávila, pueden intervenir. Ante la negativa a su exigencia, Moreno optó por abandonar el rrecintom

El evento, que reunía a militantes de la alcaldía, transcurría con normalidad hasta la irrupción del legislador. La dirigencia estatal intentó establecer un diálogo, pero no hubo condiciones para ello

Al final, entre empujones y agresiones verbales, los simpatizantes de Morena manifestaron su inconformidad con la actitud de Moreno y llamaron a la prudencia. La asamblea se suspendió sin declaraciones oficiales, mientras los seguidores del diputado lanzaban consignas como “En Carranza sin Julio no hay partido”, las cuales fueron calificadas como absurdas por el resto de los militantes.