El presidente López Obrador ha respondido vehementemente a un nuevo artículo del New York Times que intenta vincularlo con el crimen organizado, acusando a los autores de difamación y señalando una campaña de guerra sucia. El reportaje, basado en fuentes estadounidenses y tres personas familiarizadas con la investigación, sugiere que, a pesar de las acusaciones, nunca se inició una investigación formal por parte de Estados Unidos contra el mandatario mexicano. Esta situación ha avivado tensiones diplomáticas entre ambos países, con López Obrador exigiendo una explicación de Washington por las supuestas indagaciones en su contra.

 

El informe del New York Times pone en tela de juicio la validez de las fuentes utilizadas por los investigadores que intentan vincular al presidente López Obrador con el crimen organizado. Se destaca la falta de confirmación independiente de la información proporcionada por informantes, incluidos algunos previamente desacreditados como Roberto López Nájera y «Jennifer». Además, el artículo revela que agentes de la DEA fueron los responsables de filtrar la información a medios internacionales, lo que ha intensificado la confrontación entre la agencia estadounidense y el gobierno mexicano.

 

El reportaje del Times detalla supuestas reuniones entre allegados a López Obrador y líderes de carteles de la droga, así como transacciones financieras sospechosas después de las elecciones presidenciales de 2018. Sin embargo, se cuestiona la veracidad de estas afirmaciones, ya que se basan en testimonios de informantes cuya credibilidad ha sido cuestionada anteriormente. Esta revelación agrega combustible al fuego en las ya tensas relaciones entre México y Estados Unidos, especialmente en el ámbito de la cooperación en materia de seguridad y narcotráfico.