Este miércoles más de 500 mil trabajadores, incluyendo funcionarios públicos, maestros, así como conductores de trenes y autobuses, iniciaron una huelga en el Reino Unido que paralizó las actividades en diversos sectores.

En la manifestación más grande registrada en 11 años, se prevé que participen alrededor de 300 mil maestros de colegios, 100 mil funcionarios públicos, 70 mil docentes universitarios y más de 60 mil trabajadores ferroviarios, entre otros.

La paralización en el Reino Unido podría costarle a la economía 200 millones de libras esterlinas (alrededor de 240 millones de dólares).

Entre otras cosas, alrededor de 23 mil 400 escuelas en Inglaterra y Gales, se verían obligadas a suspender actividades.

Los trabajadores de cada sector tienen sus propias demandas; sin embargo, todos se unen en la reclamación de aumentos salariales frente a la inflación que supera el 10 por ciento.

Los ministros del gobierno del primer ministro conservador, Rishi Sunak, han reiterado que aumentar los salarios al nivel que exigen los sindicatos dispararía la inflación, mientras que la meta es reducirla las próximas semanas.

Con información de Reuters y AFP.