Durante la primera parte de la audiencia intermedia de Emilio Lozoya por el caso Odebrecht argumentó que ni la Unidad de Investigación Financiera (UIF) ni Petroleos de México (PEMEX) fueron víctimas de los sobornos que la contratista brasileña habría dado a Emilio Lozoya.

Ante la negativa del juez de control de aceptar este argumento por parte de la defensa de Emilio Lozoya el exdirectivo de PEMEX solicitó suspender la audiencia por considerarla violatoria de Derechos Humanos: «Si nosotros estamos argumentando que Pemex y la UIF no tienen personalidad, considero que continuar con la audiencia afecta mis derechos fundamentales y mis derechos humanos, por lo que solicito que suspenda la audiencia», apuntó Lozoya.

Según lo estipulado por la defensa de Emilio Lozoya ninguna de las dos entidades recibieron una afectación directa por los hechos de Lozoya al frente de PEMEX y al considerarse dentro de la denuncia de la Fiscalía que ‘se puso en riesgo el bien jurídico’ no se consta una violación por lo que buscará promover un amparo federal.

«Si sólo se puso en riesgo un bien jurídico y no se lesionó, ¿por qué se exige la reparación de un daño inexistente?», cuestionó el abogado de Emilio Lozoya. De alcanzar el amparo federal Lozoya podría llegar a un ‘criterio de oportunidad’ que le permita obtener su libertad.