Después de que la presidenta peruana, Dina Boluarte señalara que el mandatario mexicano no ha querido entregar la presidencia de la Alianza del Pacífico el presidente de México señaló que no quiere entregar la dirigencia a un gobierno que catalogó como espurio.

Andrés Manuel López Obrador dijo que pondría a consulta con el Grupo de Río la situación que pesa sobre la Alianza del Pacífico para determinar alguna alternativa pues considera que la sucesión de la presidencia sería legitimar un golpe de Estado. Andrés Manuel considera como anti-democrático y contrario a los derechos humanos que se legitime el gobierno de Boluarte con esta acción.

«Castillo enfrentó cinco o seis intentos de destituirlo, e incluso no tenía ni un mes en el gobierno cuando ya lo querían quitar del puesto y lo meten a la cárcel. No hubo fundamentos legales, pues lo que hay en el fondo es una actitud clasista, racista, porque era un maestro humilde», dijo el presidente mexicano en conferencia de prensa en Sonora.