El sábado pasado el gobierno de Uruguay impuso restricciones debido a la sequía que azota al Cono Sur de Sudamérica desde el 2022.

Por tales motivos, la empresa pública que distribuye el agua en Uruguay, Obras Sanitarias del Estado (OSE), implementó duras restricciones al uso de agua potable para los habitantes de las zonas más pobladas del país.

El uso de agua potable para fines no prioritarios como el riego, lavado de aceras, llenado de piscinas y lavado de automóviles fue prohibido.

«Con motivo de la sequía que afecta al territorio nacional y especialmente en el sur del país, OSE ha exhortado a la población a consumir responsablemente el agua potable, con el objetivo de minimizar usos no prioritarios», dice el texto emitido por la OSE.

El pasado 9 de febrero, el presidente de Obras Sanitarias del Estado, Raúl Montero, aseguró en el noticiero Subrayado que la Costa de Oro, zona del departamento de Canelones, solo contaba con reservas de agua «para 15 días».

Debido a la emergencia en Uruguay, algunos sectores como la ganadería, lechería, horticultura, fruticultura y agricultura se están viendo severamente afectados.