El pasado jueves 31 de agosto se aprobó la conformación de la Mesa Directiva de la 65 legislatura denominada “Legislatura de la igualdad de género” al ser compuesta, por primera vez, por 50 por ciento de legisladoras.

La Mesa Directiva estará a cargo de la priista Marcela Guerra, quien sustituye a Santiago Creel en el cargo; la votación incluyó como vicepresidentas a Karla Almazán, de Morena, Joana Felipe Torres, del PAN, y Blanca Alcalá, también del PRI.

La secretaría de la Cámara de Diputados quedó conformada también por seis mujeres de las distintas fuerzas políticas del país.

Por Morena, la designada fue la diputada Brenda Espinoza López; Diana Gutiérrez Valtierra, por el PAN; el PRI designó a Fuensanta Guerrero Esquivel; por el Verde Ecologista, la elegida fue Nayeli Hernández Cruz, además de la diputada perredista Olga Luz Espinoza Morales y la emecista Jessica Ortega.

El único partido que designó a un hombre como representante en la secretaría fue el Partido del Trabajo, quien otorgó la distinción a Pedro Vázquez.

La Jucopo, controlada por el Cártel Inmobiliario

La Junta de Coordinación Política (Jucopo) también cambió de coordinación, pasando de la presidencia de Ignacio Mier, de Morena, a la representación del panista Jorge Romero Herrera.

Jorge Romero se comprometió a ser un puente de comunicación, respeto y unidad entre las fuerzas políticas, manteniendo la pluralidad.

“Y si la Cámara de Diputadas y Diputados es ese reflejo como país, y si la Junta de Coordinación Política es el reflejo de la Cámara de Diputadas y Diputados, incuestionablemente lo que debe de imperar es ese mínimo respeto que desde esta presidencia –evidentemente– es mi compromiso continuar, porque esa ha sido la sintonía y así habrá de proseguir”, apuntó el panista.

No obstante, Jorge Romero ha sido acusado en el pasado de ser el cabecilla del grupo político que implementó el esquema del fraude inmobiliario sistemático en la alcaldía Benito Juárez, en la Ciudad de México, cuyas investigaciones orillaron al diputado a tramitar un amparo para eludir la justicia (Ver Nota).

Además, Público señaló en meses recientes que Romero gusta de cosificar a las mujeres en redes sociales y su perfil exhibe a modelos o cuentas que venden contenido sexual, perpetuando así la violencia por razón de género que aqueja al país. (Ver nota)