Alberto Otárola, figura clave en el gobierno de Dina Boluarte, enfrentó serias acusaciones tras la filtración de un audio donde se le escucha insinuar a Yaziré Pinedo Vásquez, de 25 años, con ofertas de trabajo a cambio de favores personales.

 

El caso reveló presunta utilización de recursos estatales para espiar a Pinedo, junto con la obtención de contratos millonarios por parte de mujeres cercanas a Otárola, como Rosa Rivera Bermeo, aumentando la presión sobre el líder del gabinete y generando interrogantes sobre la integridad de su gestión.

 

Esta revelación, acompañada de acusaciones de tráfico de influencias y espionaje, ha generado una ola de críticas y dudas sobre la ética y la transparencia en el Ejecutivo de Dina Boluarte.

 

El caso ha desatado una ola de indignación y demandas de renuncia por parte de diversos sectores políticos y sociales, mientras que la presidencia del país ha anunciado una reunión con Otárola para exigir explicaciones y tomar medidas correspondientes.

 

Estas acusaciones han generado fuertes críticas y demandas por parte de congresistas y grupos sociales, mientras que la presidencia del país ha anunciado medidas para esclarecer los hechos y tomar acciones disciplinarias.