El domingo 27 de noviembre, durante el desalojo de un campamento de migrantes establecido en el bordo del Río Bravo, dos venezolanos resultaron detenidos por agentes de la Secretaría de Seguridad Pública Estatal (SSPE) y fueron puestos a disposición de la policía municipal por faltas administrativas.

Se dijo que los sudamericanos identificados como Juan José C. G., de 26 años de edad, y Edison José C. G., de 34 años de edad, fueron detenidos después de lanzar una piedra a uno de los policías municipales que participaban en el operativo de desalojo y por tratar de encender una carpa con un galón de gasolina; sin embargo, ambos fueron puestos a disposición de un juez de barandilla solo por faltas administrativas, por parte de la SSPE.

En el operativo se retiraron alrededor de 800 personas en más de 300 carpas que se encontraban ahí desde el 25 de octubre, informó el Gobierno Estatal de Chihuahua.

Mauricio Rodríguez Padilla, titular en esta frontera de Protección Civil del Estado, dijo, antes del desalojo, que las fogatas dentro o a un lado de las carpas representaban un gran riesgo, así como el caso de una estufa y un tanque que retiraron hace días de una de las casas de campaña.

El funcionario también argumentó que el objetivo era reubicarlos para que acudieran a un lugar seguro, debido a que se habían registrado casos de hipotermia y problemas respiratorios a causa de las bajas temperaturas.

Con información de El Diario Mx.