A propósito del 50 aniversario del Golpe de Estado militar en Chile, el 11 de septiembre, que se derrocó y asesinó a Salvador Allende, el presidente Andrés Manuel López Obrador, reflexionó sobre los riesgos actualizados de una acción golpista.

“Todavía hay el riesgo del fascismo, del uso de la fuerza bruta para imponerse, los golpes de estado, las intervenciones militares. Eso no desaparece, pero hemos ido avanzando mucho en resolver las diferencias mediante la vía electoral, pacífica, democrática.

“Ese es el camino a seguir. Por eso indigna mucho conocer lo que sucedió en Chile, porque el presidente Allende nunca optó por la violencia. Era un pacifista”, aseveró a propósito de su próxima visita al país andino.

López Obrador consideró que hoy en día no hay muchas condiciones para que ocurra un Golpe de Estado, no obstante, es necesario fortalecer la democracia y no permitir la manipulación (“lawfare” o guerra legaloide en tribunales) que la debilita.

“Que no haya golpes de estado técnicos o mediáticos. Por ejemplo, si la oligarquía de un país, los dueños del dinero, los que se sienten dueños de un país, tienen el control de los medios (de comunicación) y manipulan, pueden lograr imponer a presidentes, autoridades, títeres, que estén al servicio de una minoría”, apuntó en su conferencia matutina de este 30 de agosto.

Por tal motivo, subrayó el Presidente de la República, “hay que seguir denunciando a los medios (de comunicación) que no informan, (sino) que defienden intereses y su propósito es saquear”.