La eutanasia es un tema de debate en México desde hace años, pero este 2023 se presentó en el Congreso una propuesta de ley para su legalización, aunque todavía está en vilo su aprobación.

El proyecto de decreto -publicado en la Gaceta Parlamentaria de la Cámara de Diputados- busca incorporar la eutanasia en la Ley General de Salud, pues en la actualidad está prohibida y contemplaría derogar el artículo 161 bis 21, donde dicta que «es entendida como homicidio por piedad así como el suicidio asistido, conforme lo señala el Código Penal Federal bajo el amparo de esta ley”.

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La iniciativa es una propuesta en conjunto de diputados de Morena, Movimiento Ciudadano, PRI, PVEM y PRD, quienes buscan que la eutanasia se permita para dar fin «a la vida de una persona en un acto deliberado, producido por voluntad expresa de la propia persona y con el objeto de evitar un sufrimiento».

La propuesta establece que la eutanasia solo sería legal en los siguientes casos:

  • Cuando el paciente sea mayor de edad y tenga capacidad de discernimiento.
  • Que el paciente sufra una enfermedad terminal o un padecimiento incurable.
  • En el caso en que el paciente padezca un sufrimiento físico o psíquico insoportable.

“Legislar en esta ruta generaría los mecanismos para que los ciudadanos tengan elementos que les permitan tomar decisiones libres, incluso en la última etapa de la vida, lo que debe realizarse bajo la existencia de un marco legal que contemple la autonomía de las personas para elegir cómo terminar su vida, en caso de sufrir un padecimiento incurable y terminal”, explica un párrafo de la iniciativa publicada en la Gaceta Parlamentaria de la Cámara de Diputados.

Los argumentos a favor y en contra, así como las reglas

De aprobarse y aplicarse, el proyecto prevé la regulación, pues dicta que sólo podría aplicarse por un médico titulado, aunque el personal de salud cuenta con la opción de no participar debido a motivos personales o de conciencia. De negarse, tienen la obligación de canalizar al paciente con otro médico.

A su vez, sería la Secretaría de Salud la responsable de tener un registro de las eutanasias realizadas. “Contará con un sistema electrónico que haga posible recibir los informes que presenten los médicos, establecimientos u hospitales, según les corresponda”.

Los puntos a favor de la eutanasia se basan en el derecho a la autonomía y la dignidad humana. Sus defensores sostienen que los pacientes tienen derecho a decidir sobre su propia vida y muerte, y que la eutanasia puede ser una opción compasiva para aquellos que sufren un dolor insoportable.

Los argumentos en contra se basan en el valor de la vida humana y en el principio de la no maleficencia. Los opositores sostienen que la vida es un bien sagrado que no debe ser deliberadamente abreviada, y que la eutanasia puede conducir a la discriminación de los pacientes enfermos.