El pasado 22 de marzo, en la conferencia mañanera, la plataforma Infomedia, perteneciente al Sistema Público de Radiodifusión (SPR), refirió una serie de “campañas de odio” en contra del presidente Andrés Manuel López Obrador y los simpatizantes de Morena.
En la sección “Quién es quién en las mentiras de la semana”, Ana Elizabeth García Vilchis hizo alusión a diversos episodios que, a su juicio, se enmarcan en “discursos de odio” en contra de López Obrador. Comparó la quema, en el Zócalo, de una figura del primer mandatario en el marco de una marcha feminista con la quema de la efigie de la ministra Norma Piña, presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, ocurrida durante la marcha del 18 de marzo.
García Vilchis recordó, también, las afirmaciones de Francisco Martín Moreno, escritor e historiador, quien en octubre de 2020, en una entrevista con Pedro Ferriz de Con, aseguró que “quemaba vivo a cada uno de los morenistas en el Zócalo capitalino”.
“Si se pudiera volver a los tiempos de inquisición yo quemaba vivos a todos los morenistas en el Zócalo”
Eso dice uno de los voceros de la derecha: Francisco Martín Moreno
¡Son unos hipócritas!
pic.twitter.com/gdY4fGXALQ— Juan Carlos Hernández (@Juan_CarlosHA) March 20, 2023
En 2020, durante una de sus giras en el interior del país, el presidente, con la finalidad de descalificar los actos de corrupción, soltó la frase “fuchi caca”. Tras este hecho, los opositores se burlaron de él en redes sociales y lo apodaron “El cacas”. Esos son algunos episodios en los que se ha señalado a la oposición de incitar la discriminación.
En el espectro político contrario, recordemos que en abril de 2022 los legisladores de la oposición entregaron un oficio en la Oficina del Alto Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH), para alertar por una campaña de odio en su contra.
Denunciaron, en ese entonces, que el oficialismo colocó anuncios públicos con imágenes de ellos, con las leyendas “traidor” y “vendepatrias”, por impedir la aprobación de la Reforma Eléctrica que buscaba limitar al 46 por ciento la participación del sector privado en la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
No obstante, en ese contexto, el ala opositora convirtió en tendencia el hashtag #AysaTraidorALaPatria, con el que acusaban en Twitter a Carlos Miguel Aysa Damas, entonces diputado federal del Partido Revolucionario Institucional (PRI), de traidor por mostrarse a favor de la reforma.
La democracia da oportunidades inmerecidas a personas desleales. Hoy, Carlos Miguel Aysa Damas traiciona al PRI y traiciona a México.
Ni una Embajada, ni los sobornos, ni chantajes bastarán para mirar de frente a la Nación que ha traicionado.#VotoEnContra#AysaTraidorALaPatria
— Alejandro Moreno (@alitomorenoc) April 13, 2022
Pero, ¿cómo se define el discurso de odio? De acuerdo con la organización Artículo 19, en un texto firmado por Juan Vázquez, el discurso de odio es “cualquier tipo de expresión que manifieste una emoción intensa e irracional de oprobio, enemistad y aversión hacia un individuo o grupo de personas, respecto de características personales de raza, color, sexo, lenguaje, religión, opiniones políticas o de otro tipo, nacionalidad, propiedad, nacimiento, origen o identidad indígena, discapacidad, estatus de migrante o refugiado, orientación sexual, identidad de género”.
En 2012, el Consejo Nacional Para Prevenir la Discriminación (Conapred) dio a conocer los resultados del ejercicio denominado «Tweetbalas: palabras que hieren a México». Entre los hallazgos destacan que los hashtags con más menciones fueron: #indio, #puto, #naco, #zorra, #eresputo, #bitch, entre otras ofensas. Una década más tarde, el fenómeno se ha intensificado.
Ricardo Bucio, presidente de la Conapred, en su texto “Contra el discurso de odio en redes sociales: palabras que hieren a México”, alerta que en México diariamente se viralizan hashtags “discriminatorios que relacionan la preferencia sexual, la falta de buen gusto o de recursos económicos con la apariencia física”
Y agrega: “Y, claro está, surgen voces indignadas que exigen frenar esas expresiones; sin embargo, esa reprobación no se materializa en un rechazo social concreto que pare su reproducción. Incluso, cuando se detecta esta situación en redes sociales, se cree que las expresiones de personajes públicos o contenidos vertidos en los medios de comunicación son inofensivas y que se trata sólo de expresiones características del humor negro del mexicano, sin consecuencias reales para la vida de las personas”.
Este tipo de discursos -desafortunadamente- en ocasiones se traducen en agresiones. Según el Séptimo informe de violencia política en México: proceso electoral 2020-2021, elaborado por Etellekt Consultores, en ese periodo se registraron “un total de 1,066 delitos globales (agresiones) en contra de las personas políticas, de las cuales 102 fueron víctimas de homicidio doloso, 36 de ellas eran aspirantes y candidatos a cargo de elección”.
El pasado 20 de febrero, en el marco del Día Mundial de la Justicia Social, RacismoMX y la UNESCO lanzaron la campaña #RevolucionaElAlgoritmo, un llamado contra el racismo y los sesgos discriminatorios en plataformas y servicios digital que pretende transformar el algoritmo.
No obstante esos esfuerzos, los discursos de odio en redes sociales van en aumento. El 2 de diciembre de 2022, The New York Times reveló que, antes de que Elon Musk comprara Twitter, los insultos en contra de los afroamericanos aparecían en dicha red social, en promedio, 1,282 veces al día; después de que el multimillonario se convirtiera en propietario de Twitter, saltó a 3,876 veces al día.
En este escenario se llevarán a cabo este año las elecciones de Coahuila y el Estado de México.