Acostumbrada a una vida de lujos, a codearse con la clase política y a estar dentro de los círculos más exclusivos del país y a manejar las relaciones de poder como su pan de cada día. Esa es, a grandes rasgos, la definición de la vida de la hoy alcaldesa de Álvaro Obregón.
Lía Limón García es abogada por la Universidad Iberoamericana con estudios de posgrado en el extranjero que fueron pagados a costa del erario público pues su padre Miguel Limón fue uno de los actores del neoliberalismo en México. Con cuna priista Lía creció viendo como su padre se convertía en un elemento de Miguel de la Madrid, de Carlos Salinas de Gortari y de Ernesto Zedillo. Naturalmente el nepotismo llegó cuándo Lía volvió al país después de sus estudios.
Lía traicionaría, al menos en las formas, a su cuna priista para afiliarse al PAN en 2005, justo a tiempo para las elecciones presidenciales, tan coincidente resultó su afiliación que fue designada como asesora de asuntos internacionales de la campaña de Felipe Calderón. Desde esa entrada por la puerta grande y sin un trabajo político previo Lía Limón estaría cobijada para desarrollar una carrera oscura pero con pocos o casi ningún resultado visible. Lía es la comadre que está en su cargo porque es amiga aunque no haga nada en realidad.
Después de la elección en la que Lía fue asesora pasó, a trabajar tras bambalinas creando programas de subrogación de guarderías. Un jugoso negocio para la familia de Margarita Zavala pues su prima firmaba los convenios para que Felipe Calderón le diera dinero para administrar las guarderías y Lía Limón se encargaba de hacer la planeación de los lugares y los presupuesto millonarios. Un negocio redondo entre amigos y familia que costaría 49 vidas inocentes en Sonora. El caso ABC fue el resultado del plan de Lía y Zavala para enriquecerse.
También en 2009 y como buscando tener fuero para no ser juzgada por el caso ABC Lía fue diputada local por el distrito XIV ubicado en Tlalpan, en la Ciudad de México. Su primer puesto público medianamente ganado por esfuerzo pasó sin mayor relevancia pues no impulsó ninguna propuesta elemental ni tampoco consiguió posicionarse cómo una estratega política, aunque sus diplomados digan que lo es.
Al terminar su diputación, en 2012 Lía decidió volver a su origen priista e integrarse al gabinete de Enrique Peña Nieto en dónde fue designada por Osorio Chong como Subsecretaria de Asuntos Jurídicos Y Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación. Bien cobijada por el grupo Atlacomulco y con la impunidad del caso ABC ganada Lía Limón demostró su brutalidad política cuándo ante el caso Ayotzinapa Lía decidiera resolver las cosas a billetazos.
La Subsecretaria de Derechos Humanos de SEGOB ofreció dinero a los padres de los 43 normalistas asesinados para que mintieran ante los organismos internacionales y avalaran la versión que el gobierno había presentado. Acostumbrada a resolver los problemas con palancas y billetes Lía quiso comprar la dignidad de los padres de Ayotzinapa pero no tuvo éxito y el escándalo se dió a conocer.
Casi como un modus operandi en el que después de algún escándalo en el que tiene que existen pérdidas humanas Lía Limón terminó siendo diputada, esta vez por el Partido Verde y por vía plurinominal en el 2015. Apenas unos meses después de que el escándalo de Ayotzinapa cobrara relevancia Lía ya contaba con fuero para no poder ser juzgada por su actuar en SEGOB. Nuevamente, como quien usa el poder como un medio de impunidad Lía no presentó ninguna reforma de relevancia en la cámara de diputados y pasó sin pena ni gloria.
En 2018 Lía Limón renunciaría al Partido verde para volver a enlistarse en el PAN y apoyar a Ricardo Anaya durante la campaña presidencial. Tras la estrepitosa derrota federal y local la panista tuvo que dejar la vida pública por tres años hasta que en 2021 se convirtiera en la alcaldesa de Álvaro Obregón. Lía consiguió la candidatura a la alcaldía tras la muerte de Leonel Luna en un accidente de tránsito. ¿Suerte? Quizá pues era claro que sería Luna quién encabezaría a la coalición del PRI, PAN y PRD en la demarcación.
Lo que alcanzó a aprender bien Lía de Leonel es hacer uso de las necesidades de las personas para conseguir el poder, Limón prometió en campaña la entrega de terrenos protegidos o con valor ambiental a cientos de personas a cambio de su voto, lucró con la muerte de Leonel para que sus votantes se decidieran a votar por ella y prometió hasta gobernar con la foto de Luna en su oficina, “para que supervise el trabajo”, dijo Lía.
Nacida en una de las cunas de oro del neoliberalismo priista, beneficiada de la alternancia panista, empresaria a costa de la vida de las personas y con una suerte envidiable para recibir al menos 6 propiedades en donaciones cuyo valor es de más de 20 millones de pesos, con una trayectoria política que no tiene trascendencia pero sosteniéndose de los caciques que llevaron al poder a Leonel Luna ahora Lía Limón suspira por la candidatura a la jefatura de gobierno.