Habría sido un infarto lo que llevó a Miguel Barbosa a recibir atención en el hospital Moreno Valle de Puebla pero su condición general de salud hizo que se trasladara a la Ciudad de México. Cuando el helicóptero llegó al Instituto Nacional de Cardiología el gobernador ya no contaba con signos vitales.
Según un reporte conseguido por Reforma el gobernador Miguel Barbosa sufrió un infarto pero su delicado estado de salud derivado de sus enfermedades crónicas como la diabetes hizo imposible tratar el infarto en Puebla.
El traslado a Ciudad de México estuvo a cargo de un helicóptero ráfaga. Sin embargo la maniobra no pudo ser concretada con éxito y el gobernador falleció antes de arribar al hospital.
Miguel Barbosa tenía 63 años de edad y complicaciones diabeticas que ya habían puesto en peligro su vida con anterioridad a pesar de eso se le vio activo en las marchas en apoyo al presidente de la República días antes y se mantuvo al frente del gobierno de Puebla hasta el último día.